Probando la meditación y el yoga

¿Cuándo fue la última vez que estuviste sin hacer nada? En mi caso hacía bastante tiempo. Y aunque estoy trabajando mientras viajo por Tailandia y a veces me tiro al sol en una hamaca, mi mente no descansa. Estoy tumbado, pero sigo dando vueltas a ese hotel que tengo que reservar, a una llamada con un cliente, al nuevo proyecto de app que tengo que planificar con el equipo…  

Estar trabajando y viajando a la vez implica organización y a veces me da la sensación de que no que no tengo tiempo. Mi mente no sabe parar, y me ataca con cientos de pensamientos. A veces se tira horas pensando en cosas que no puedo arreglar, rumiando qué dicen. Imagino que también te pasa, un pensamiento que te preocupa llega a tu cabeza de manera repetida y no puedes parar de dar vueltas, una y otra vez, intentando entender el significado. Estos pensamientos nos quitan tiempo para estar en el momento presente y en las cosas realmente importantes.

Desde que estoy en Tailandia estoy mucho más relajado, pero sigo teniendo las mismas o más cosas en las la cabeza y mi mundo sigue yendo super rápido, así que hoy he decidido aprovechar para parar. ¿Cómo? Probando la meditación y el yoga.

Estos días estoy en Srithanu, en el oeste de la isla Koh Phangan. Es un pequeño pueblo de pescadores tomado por expatriados tratando de encontrarse a sí mismos. Ahora está lleno de centros de meditación y yoga, y de restaurantes de comida vegana. Hay un ambiente muy bueno. Y como todo el mundo a mi alrededor medita y hace yoga he decidido intentarlo. He elegido un sitio frente al mar llamado Samma Karuna, especializado en retiros de yoga, y he estado más de tres horas ahí.

Samma Karuna en Koh Phangan
Samma Karuna en Koh Phangan

Meditación vipassana

Primero he ido a meditación vipassana. Es una clase gratuita que se hace todos los días a las 7.15 de la mañana durante una hora. Lo primero es sentarse en el suelo en posición cómoda y con la columna recta. Cuando llegué casi todos los alumnos estaban dentro, así que busqué una esterilla libre y me senté con las piernas cruzadas. Al empezar la clase el profesor nos guió durante unos minutos. Yo pensaba que meditar era sentarse a reflexionar sobre nuestra vida y nada más lejos de la realidad, se trata de observar como espectadores nuestra respiración, sin intentar modificarla ni cambiarla, estando presentes en el momento y pensando únicamente en nuestra respiración. En cómo el aire entra por la nariz y llega a los pulmones. Cuando un pensamiento de otro tipo se cruza en nuestro camino (cosa que pasa continuamente), sin juzgarlo ni juzgarnos, simplemente lo apartamos y volvemos a nuestra respiración.

Después de su introducción inicial se ha callado y nos ha dejado solos meditando. Y yo que pensaba que era una meditación guiada… He conseguido como mucho estar 30 segundos concentrado. Es mucho más difícil de lo que parece y cuando llevaba 10 minutos me han empezado a doler las piernas así que me he levantad muy silencioso para coger unos cojines y sentarme sobre ellos. Aun así cuando llevaba 10 minutos más, volvía a tener las piernas dormidas y me he vuelto a levantar a coger un banquito de meditación que te permite sentarte de rodillas y que ha sido la clave. La verdad es que ha sido una experiencia muy buena, en silencio, con el mar de fondo. En algunos momentos he notado cierta ansiedad porque el tiempo se me hacía largo, pero es algo con lo que hay que luchar ya que es difícil pararse de verdad. He salido super relajado y los pocos momentos de concentración han sido geniales.

Samma Karuna en Koh Phangan

Hatha Yoga

Después he hecho una clase de hatha yoga de dos horas y media. Nunca había hecho yoga en España, ha sido mi primera vez. Se trata de practicar posturas (asanas) mientras respiramos de forma consciente. Las posturas parecen fáciles cuando las ves, pero son super difíciles de mantener, sobre todo para mí que soy poco flexible. Nuestro profe nos ha dicho que lo importante no es hacer bien el asana, sino en nuestras sensaciones. Me ha parecido un ejercicio fantástico, aunque necesito mucha más práctica y a veces me he frustrado con las posturas. Para acabar hemos hecho un ejercicio de relajación y la verdad es que me he quedado un dormido.

Después de tres horas y pese a ser mi primera vez, noto que estoy mucho más tranquilo y con la mente más descansada. Voy a seguir probando y espero incorporar unos minutos de meditación cada día al volver a España. Creo que liberar la mente es una estrategia genial para poder pensar en las cosas que importan de forma más sistemática y ordenada.

Y tú, ¿haces algo para liberar tu mente? ¿crees que lo necesitas?

3 opiniones en “Probando la meditación y el yoga”

  1. La meditación vypasana que muchos amigos mios hicieron en Nepal consistía en encerrarse durante siete o nueve dias en un monasterio, meditación guiada por la mañana pero no podías hablar con nadie durante todo el recorrido. La gente me habló muy bien de esa experiencia.

    Otra cosa que me sirvió mucho para encontrarme a mi mismo (quizás he estado en una situación relativamente similar a la tuya) fué probar la Ayahuasca. Puedes encontrar ayahuasca en el sudeste asiático, pero te recomendaría que la probaras en España o Latinoamérica.

    Para que me entiendas, de la misma manera que ionic es un framework para desarrollar apps mobile en javascript que te ayuda a programar más rápido y con menos errores, puedes entender la Ayahuasca , el yoga, la meditación, como «otros frameworks» para desarrollo personal y crecimiento interior.

    Muy a menudo dicen que la meditación «es inutil» porque «solamente consigo meditar 30 segundos antes de irme por las ramas….

    esos 30 segundos también son buenos, te dejo un video de un monje explicando esto en 1 minuto que te va a ser (espero) útil. video muy top

    https://www.youtube.com/watch?v=LkoOCw_tp1I

  2. Me gusta el artículo!
    Ojalá hubieran muchos sitios para practicar Yoga cerca de la playa o irse de retiro sin que costara mucho dinero! Y eso que vivo en Barcelona!
    Hago Yoga cada mañana a las 5.15 am hasta las 6 am a y la clave es la respiración y la mente concetrada en ti. Después día a día, haces posturas más difíciles y tu cuerpo y tu estabilidad mejoran!
    Después de cada clase doy gracias al universo por el día que viene y en marcha!
    Me gusta tu blog!

  3. El yoga me ha salvado la espalda, aquí en Barcelona, y me ha permitido descubrir la respiración y el mindfulness. Viví 2 años en India cuando tenía 25 años pero en esta época todo esto me parecía demasiado esotérico y no compatible con una vida «normal», ahora voy haciendo cambios en mi vida para compaginar trabajo, familia, amigos y ética de vida. Todo pasa por conocerse mejor y aceptarse. La mente es un músculo que se entrena como cualquier otro músculo, poco a poco, cada día. Espero que seguirás en este camino, te irá bien 🙂 Gracias por compartir tu experiencia, sigue tu camino, no hay otro que sea mejor.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *